Los frutos secos

Los frutos secos también son semillas y, al igual que estas, son un alimento muy importante que deberíamos incluir en nuestra dieta por su gran aporte a nuestro organismo de vitaminas, minerales y fibras. También comparte con ellas la creencia de que engordan mucho, pero hay que recordar que su gran nivel calórico, que es real, no termina siendo muy determinante si consumimos raciones pequeñas y equilibradas.

En este post intentaré sinterizar algunos de los beneficios que nos trae su consumo. Como ya he dicho, no soy nutricionista, lo que intento hacer, con este y otros productos, a partir de un trabajo de resumen y combinación de diferentes fuentes es comentar los aportes de los diferentes alimentos de manera general, no para que se lo tome como un “medicamento”, se consuma con tal regularidad por tal motivo, sino como un texto que oriente y que nos haga darnos cuenta de la importancia de una dieta cada vez más equilibrada y diversificada.

En este caso, los frutos secos, un alimento con un importante aporte de calcio y otros minerales; que se los considera dentro de un dieta antioxidante (contiene vitamina E y C), que aporta fibra (ayudan al funcionamiento del tránsito intestinal), fósforo (son pocos los alimentos que lo contiene), grasas insaturadas (las saludables, aquellas que ayudan a reducir el colesterol malo); que fortalece el sistema cardiovascular, etc. 

Dentro de sus beneficios, hay que destacar que es una de los más importantes reemplazantes o alternativas a las proteínas animales, por lo que suele incluirse en dietas vegetarianas, para prevenir la anemia.

Entonces, queda claro la importancia de incorporarlos en nuestra dieta. Sobre la idea de que engordan, hay algo que se debe tener en cuenta, siempre que se habla de su alto nivel calórico (por ejemplo las avellanas tienen 550 calorías), se lo hace a partir de un sistema de medición que igual todos los productos a los 100 gramos; por lo que sí sólo comemos tres o cuatro nueces, el nivel no es tan significativo.

Por lo tanto, la recomendación es sumar pequeñas porciones a la dieta semanal, sobre todo ahora que está empezando a llegar el frío. Las opciones: picadas en ensalada, en yogures como parte de un desayuno, trozadas en panes, en harinas, etc.

Los frutos secos que suelen consumirse cotidianamente y sus principales aportes son:

Nueces:

            Se trata de un producto que rico en vitaminas (B, E) y minerales (fósforo, hierro, potasio, calcio y magnesio y microminerales zinc, cobre y manganeso), que contiene mucha fibra y proteínas y que nos significa una gran fuente de energía. Aporta 675 kilocalorías por cada 100 gramos.

            Es por esto que tiene enormes beneficios para la salud, entre los que se puede mencionar: ayuda a los sistemas cardiovascular, nervioso (previenen los coágulos, relaja los vasos sanguíneos y reduce la tensión arterial), e intestinal; es antioxidante; es recomendada para el tratamiento de la arteriosclerosis; humecta la piel; etc. También se le reconocen beneficios para los problemas anímicos, como el tratamiento del estrés, la depresión y el agotamiento nervioso.

Almendras:

            Igual que las anteriores, son una gran fuente de energía y fibra. En cuanto al aporte de minerales y vitaminas, debemos decir que es una de las más ricas fuentes (no animal) de calcio, contiene altos niveles de vitamina E; también aporta: fósforo, potasio, magnesio, hierro, azufre, cloro, aluminio, manganeso, cobre, cinc, y vitaminas B 1, B 2 y PP.

            Principalmente se le reconocen beneficios para el corazón, el sistema nervioso, el colesterol, el sistema intestinal, etc.  Algunos al recomiendan para aumentar la producción de leche materna.

Avellanas:

            Rico en minerales (magnesio, calcio) y vitaminas (A, E, B1, B2 y C), por lo que es efectiva contra el envejecimiento, la descalcificación, la osteoporosis,  la sequedad de la piel y el colesterol. Protege el sistema nervioso

Maní:

            También rico en minerales (hierro, calcio, fósforo, magnesio, manganeso, cloro y potasio) y vitaminas (A y B1, sobre todo, pero también, B-1, B-2, B-3, C, E y D).

             Sería importante que optemos por comprarlos sin el agregado de sal.

Castañas:

            Se diferencia de las anteriores por tener mayor contenido de potasio, el cual ayuda a prevenir problemas de hipertensión. No contienen tantas calorías

Fuentes:

• http://www.actosdeamor.com/
• http://www.alimentacion-sana.com.ar
• Cuadernillo INTA
• http://www.enbuenasmanos.com/